Creer que el votante de Ciudadanos en Madrid era como el votante de Ciudadanos en Cataluña es un disparate inexplicable. En Cataluña Ciudadanos se nutrió del voto del PSC en el cinturón currante barcelonés, ante el vértigo que sentía por el viaje unilateral independentista. En Madrid la fuerza nutricia de Ciudadanos era la misma que la de Esperanza Aguirre, una fuerza con epicentro en los barrios pudientes que tras la sentencia de la Gürtel, alentada por la foto de Colón, se dividió en tres.
Que avezados estrategas del PSOE pretendieran capturar voto de Ciudadanos en Madrid vetando, cansinos otra vez, a Pablo Iglesias, o es fruto de ceguera o de la maldad delirante de no querer que la izquierda gane para que un triunfo de Ayuso debilitase a Pablo Casado y destruyese a Pablo Iglesias, disminuyendo su influencia en la política estatal. Prefiero creer que fue lo primero, un error de listillos, antes que una alucinación maligna.
En el debate de Telemadrid, Ángel Gabilondo rectificó de golpe en su penúltima intervención: “Pablo, tenemos doce días para ganar”. ¿Conocía Gabilondo, de manera privilegiada, los datos originales del CIS que hemos conocido después cocinados por Tezanos? La táctica ciudadanista de derechas del candidato del PSOE no solo no extrae nada de Ciudadanos, sino que le hacía perder voto por la izquierda, tal vez mucho más de lo que Tezanos publica, hasta el punto de dejar al PSOE en evidencia. No hacía falta ser un lince politólogo para predecirlo.
En Madrid se dibujan dos escenarios. Ser capital europea del trumpismo o acabar con veintiséis años de cenáculos de corrupción, trapicheos y desigualdad. En el debate Ángel Gabilondo se sumó a la estrategia de victoria definida por Pablo Iglesias cuando dejó la vicepresidencia para disputar Madrid. La frase “Pablo, tenemos doce días para ganar” acepta que ningún voto progresista y de izquierdas es inútil. La única manera de que los menos con sus amenazantes palos de golf, no se impongan a los más, las y los trabajadores de toda clase.
Con la rectificación de Gabilondo Pedro Sánchez puede demostrar que el PSOE quiere ganar Madrid. Antes del 4M puede instigar al ministro José Luis Ábalos para que acuerde con Ione Belarrra la limitación de los precios del alquiler en las zonas tensionadas, puede facilitar a Yolanda Díaz la subida pendiente del SMI en el año 2021, bloqueda por la ministra Nadia Calviño, y puede lanzar un claro mensaje de defensa de la democracia anunciando la desactivación ya de la ley mordaza.
Si el PSOE, Ángel Gabilondo, y Pedro Sánchez quieren de verdad ganar Madrid deben demostrar que su corazón y su acción está con las necesidades y derechos de las mayorías. “Pablo, tenemos doce días para ganar” es un Sí se puede.