Joan Manuel Serrat
El partido pirata, Piratenparte, ha obtenido el 8,9% de los votos en el Estado Lander de Berlín, 15 de los 130 escaños. ¿Debe extrañarnos este rotundo resultado para un partido de reciente creación que articulaba su programa electoral sobre tres o cuatro propuestas centrales?
Los piratas ya habían irrumpido en la eurocámara por Suecia con un escaño. Parecía, como todo lo nuevo, una anécdota temporal. Ahora tienen representación en varias localidades alemanas, entre ellas Hesse.
El éxito pirata no es una vanalidad, nacen con una propuesta central, la libertad en la red. Justo el espacio en el que en la actualidad se están conformando los estados de opinión colectivos, las conciencias compartidas, sin diques de contención del capital económico que alimenta el control mediático de los lobbys de prensa. Recuerden la revolución francesa, primera máxima: Libertad.
El éxito pirata no es una vanalidad, nacen con una propuesta central, la libertad en la red. Justo el espacio en el que en la actualidad se están conformando los estados de opinión colectivos, las conciencias compartidas, sin diques de contención del capital económico que alimenta el control mediático de los lobbys de prensa. Recuerden la revolución francesa, primera máxima: Libertad.
En las elecciones de Berlín su lema era "libertad en vez de miedo". Para quienes creen que la sencillez para explicar el pensamiento complejo es un déficit, ahí tiene un ejemplo de lo contrario.
Las sentencias de 15M tienen la misma fuerza comprensiva que la poesía, el aforismo o, en la palabra de Carlos Edmundo de Ory, el aerolito, es un destello de luz, un golpe certero. Si no tenemos miedo, no tienen poder. Un contundente epigrama 15M que desvela el misterioso enigma del ejercicio del poder.
Segunda propuesta: el respeto por los derechos humanos, el respeto por las personas. Segunda máxima: Igualdad. No somos mercancia en manos de banqueros, diría el 15M. ¿Quien da más?, sí hay más: Sin casa, sin curro, sin pensión, sin miedo, de nuevo el 15M.
El Partido Pirata alemán quiere transporte público gratuito, red wifi universal sin coste como derecho esencial. Esto se llama Solidaridad.
El Partido Pirata alemán quiere transporte público gratuito, red wifi universal sin coste como derecho esencial. Esto se llama Solidaridad.
El partido pirata defiende el derecho a la intimidad, no más cámaras en las calles, no más gran hermano, no más control de lo personal, no más carne humana indefensa.
Por contra exigen la transparencia total al resto de formaciones políticas y a los gobiernos, halagan wekeLeaks y dicen que con las nuevas tecnologías trasmitirán desde el parlamento todo lo que ocurra, no habrá puertas cerradas.
Desde luego, más allá de lo anecdótico es un aviso para navegantes. Estos (aquí está su déficit, la mayoría son hombres) sí han sabido llevar su particular 15M a la política. Pero claro Germany is diferent, su sociedad civil da envidia, la juventud alemana demuestra el poder del voto.
