Se llama cantidad de movimiento p al producto de la masa por la velocidad, p = m x v . Se ve que p puede ser grande tanto si m es grande como si v es grande. Es el motivo por el que es difícil frenar un camión a poca velocidad y una bala a mucha velocidad, El producto m x v es grande (hay mucha cantidad de movimiento) en los dos casos, mucha inercia.
Un sistema electoral sería como un sistema inercial, la cantidad de movimiento de una opción, producto de su masa (número de electores) por su velocidad (ganas que tengan de votarla), no se cambia de la noche a la mañana, hay una inercia tanto para acelerarla como para frenarla.
Lo que indica la encuesta del CIS de octubre de 2016 es que en el sistema electoral, producto del régimen del 78, existen fuerzas predominantes que intentan frenar a Podemos, consiguen limitar su cantidad de movimiento (crecimiento), al tiempo que obligan a actuar al PSOE reduciendo su cantidad de movimiento.
El PSOE sigue perdiendo m, que va a la abstención, yo diría al desencanto, Podemos mantiene su m pero necesita recoger más de la abstención, ergo necesita reactivar la esperanza.
Esto no se hace con pamplinas light que aún miren al PSOE y las instituciones del régimen como espacios de posibilidad, se hace, lo estamos viendo en otros lugares y por proyectos reaccionarios, con claridad expositiva y contundencia dialéctica.
Por eso, apoyo en Madrid a Pablo Iglesias y en Andalucía a Teresa Rodríguez.
Se equivoca hoy Ignacio Escolar achacando la no recogida (momentánea) del voto del PSOE por parte de Podemos. El sistema tiene sus inercias, esas son las que hay que favorecer o vencer según el caso. Favorecer la caida del PSOE y vencer al desencanto plantando cara al PP.
Fijaos si hay inercias que tras el 15M el PP arroyó en las urnas, venía desde atrás una buena masa a la que era imposible frenar en cinco meses.
Una marea tiene una enrome masa inercial, esa es la marea que promueve Teresa Rodríguez. Por Una Marea Andaluza.
